Desde que era chiquita, siempre tuve el sueño de ser mamá, pero también tuve el sueño de ser una gran empresaria y lograr muchas cosas. Desde hace 13 años empecé a imaginarme cómo podría crear un estilo de vida que me permitiera compartir tiempo con mis hijos el día que llegaran.Y por eso decidí empezar coaching y montar mi empresa.

Cuando nació mi hija Maya, pude dedicarle sus primeros dos años de vida, trabajando un poco, pero estando 100% presente con ella. Sin embargo, sentía un fuego por dentro porque yo quería ser más y hacer más, mi empresa estaba creciendo despacio y había algo más grande que yo quería entregar.

Cuando Maya cumplió 2 años decidí meterla a la guardería para dedicarme más a mi empresa. Y entonces apareció la voz de la culpa: “estás siendo una mala mamá porque no estás con tu hija tanto tiempo”. Yo quiero ser la mejor mamá para mi hija, y por lo tanto me he tomado varias semanas reflexionando sobre la creencia que para ser una buena mamá necesito pasar la mayor parte del tiempo con ella.

En este video no te ofrezco una respuesta de cuantas horas debemos pasar con nuestros hijos para ser una buena mamá. Te ofrezco un espacio para tener esta conversación, pues es la primera generación de la historia donde las mujeres estamos siguiendo nuestros sueños. Tenemos que redefinir la creencia de que ser una buena mamá es estar todo el tiempo con los hijos. Para mi ser una buena mamá es estar presente con Maya en los momentos que comparto con ella.